¡Hola! ¿Cómo están? Sé que he estado desaparecida de estos rumbos, ¡y no saben cuánto lo siento! Pero es que, entre los arreglos que estamos haciendo a nuestra nueva casa (no, todavía no nos cambiamos, ¿pueden creerlo?), los proyectos con clientes, que este año se han venido duro y tupido (afortunadamente), más dos que tres otros proyectos que se están cocinando… la verdad es que me ha costado muchísimo organizarme para poder tener tiempo de bloguear. Sin embargo, he tratado de compensar, publicando al menos en Instagram, donde tanto en mi feed como en las Stories les he estado compartiendo mis andanzas en todas estas aventuras… ¿las han visto? Si es así, quizá les haya tocado ver esta foto de arriba, de mi último proyecto de decoración: la renovación de un comedor contemporáneo. Bueno, pues hoy estoy súper emocionada y feliz no sólo de estar de vuelta, sino de hacerlo precisamente con un post muy especial en donde en donde les mostraré cómo logramos transformar completamente este comedor, de un espacio un tanto aburrido y sin chiste, a esta belleza que sorprende desde el primer momento que entras a la casa. ¿Empezamos? 😀
Antes
Como les decía, este comedor es lo primero que ves al entrar a la casa, así que había que hacerlo muy especial. Con un espacio generoso y una distribución súper abierta, tenía todo para brillar, pero no lo estaba haciendo. Y es que, se sentía un tanto vacío y frío, con el puro comedor en el centro, la lámpara tan pequeña en relación al espacio, y el reloj metálico (muy bonito, pero no quedaba muy bien ahí).
Después
Es increíble cómo unos cuantos cambios hicieron tanta diferencia… ¡ahora el espacio se siente mucho más luminoso y acogedor! ¿Vieron que dejamos la misma mesa? Incluso les diré un secreto: también son las mismas sillas, nada más que las retapizamos, y les cambiamos el color de las patas. Este juego de comedor era de aquellos que se usaron hace mucho, seguro los recuerdan, cuando el color chocolate reinaba en la decoración. La verdad es que se sentía muy pesado, era oscuro y nada acogedor, y lo peor es que el vinipiel ya estaba muy lastimado. Ahora con la tela gris y el capitonado, se ve hermoso, cálido, contemporáneo… con una belleza atemporal. Y lo mejor, la tela es especial, ya que viene con teflón en las fibras, así que repele las manchas… ideal para ellos que tienen un niño pequeño.
Antes
Acá se aprecia mejor el juego de comedor. La mesa tiene una base de mdf pintado de color chocolate, y una linda cubierta de mármol beige y café. Estaba en perfectas condiciones, sin embargo, con esas sillas se veía ya muy anticuada.
Después
Es increíble cómo esa misma mesa se ve tan diferente ahora. El gris de las sillas quedó perfecto con los tonos beige, incluso ayuda a que se aprecie mejor la veta del mármol. De igual manera, la base color chocolate fue ideal para ayudar a que destaquen los tonos madera de las patas de las sillas.
Por supuesto, un gran cambio fue la lámpara colgante, ahora mucho más adecuada para el tamaño del espacio, y a una mejor altura, más cerca de la mesa. Los clientes querían un modelo que no sólo fuera decorativo, sino que ayudara a dar buena iluminación, ya que es la única salida de luz en el espacio. Por eso les sugerí esta hermosura de lámpara, la cual me pareció ideal por muchas razones: su diseño es espectacular, el tono dorado da el toque sofisticado pero a la vez moderno al espacio, es ligera visualmente y tiene muchas bombillas, así que ahora hay mejor iluminación. Usamos focos led, así no se gasta tanta energía 😉
Qué bella, ¿verdad? Sus bracitos permiten jugar un poco con las alturas de las burbujas de cristal.
No sabría decir si la estrella del espacio es la lámpara, o este precioso rincón que creamos en el único murito disponible en el espacio. Es muy chiquito (mide menos de metro y medio de ancho), pero es justo el remate visual que tenemos cuando entramos a la casa, por eso me esmeré en hacerlo muy especial. En un principio, había pensado poner un gran espejo sobre la mesa, para rebotar toda la luz del ventanal y reflejar la lámpara increíble, pero luego, junto con la clienta, vimos que en la sala ya hay un espejo grande (y no tienen planeado quitarlo pronto), y por otro lado, también teníamos ganas de hacer un muro galería, con fotos alegres y elementos lindos que ayudaran a hacer muy acogedor el espacio. Yo creo que dimos justo en el clavo, ¿no creen? 🙂
Me encanta cómo da profundidad al espacio… ahora hay algo qué ver detrás de la mesa y sillas.
Para que este murito tuviera más impacto, decidí usar pocos elementos, pero de buen tamaño, en lugar de muchos pequeños… así se pueden ver desde lejos al entrar. Usamos fotografías de la naturaleza, me encanta cómo transmiten paz, pero también alegría. Para darle variedad, también colgué un pequeño espejo en forma de sol, y un letrero “love” que hice especialmente para el proyecto. Sobre la cubierta de la credenza, una “cuna de moisés“, la cual es ideal para interiores y da unas flores blancas preciosas (aunque a mí me encanta también sin flores).
Del otro lado, un portavelas calado en plata para dar contraste, otros dos adornitos, y una linda suculenta en macetita de concreto.
En la parte de abajo, una planta “teléfono” (también ideal para interiores) en una cesta de fibras naturales y del otro lado, unos libros de arte y una hermosa estrella que ya tenían los clientes y quedó perfecta en el espacio.
Esta es la vista desde la cocina… ¡da gusto voltear a ver algo tan lindo!!!
Finalmente del otro lado, pusimos un bello Ficus Pandurata, el cual confío será muy feliz creciendo junto a ese ventanal.
No por nada, pero ¡me encanta!!!!! Es acogedor, ligero, contemporáneo… elegante, pero a la vez moderno y un tanto relajado. Justo como lo soñé 🙂
Como siempre, agradezco infinitamente a mis clientes por la confianza que me tienen para poner sus espacios en mis manos y permitirme ayudarles a transformarlo en el hogar de sus sueños. Me encantó verlos enamorados de su nuevo comedor… incluyendo a su pequeño niñito que estaba ilusionado viendo cada uno de los detalles. Sin duda, la mejor sensación que puedo pedir.
Sé que ya fueron muchas fotos, pero sé también que muchos de ustedes disfrutan los “antes y después” deslizables… así que, ¡aquí los tienen!!! (Si están leyendo este post en su email, recuerden que tienen que venir al blog, dando click aquí, para que funcionen).
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Ahora cuéntenme, ¿qué les pareció? ¡Espero les haya gustado tanto como a mí! Recuerden que si tuvieran alguna duda, pueden dejarla en los comentarios e intentaré contestarla tan pronto como pueda 😉
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